Hace rato que no escribía por aquí, básicamente por flojera... pero bueno, en estos 6 meses que se han ido rapidísimo la vida ha continuado y han pasado cosas buenas y malas, pero una que siempre quise poner aquí para recordarla fue la de mi primer salto en paracaídas.
La verdad es que aprovechamos 5 amigos y yo el puente de marzo para irnos a Morelos y todo estuvo simplemente EXCELENTE.... todos nos fuimos en una camioneta, pero en verdad el tiempo no se siente cuando te diviertes, y eso que ibamos un poco amontonados. El viaje de ida incluyó cruzar el DF y nuestra respectiva cena en 3 Marías con las famosas "Quesadillas con Queso", WTF?!?! en mi opinión, si se llama "quesadilla" es porque tendrá queso... pero por esos rumbos tienes que especificarlo porque sino BYE BYE AL QUESO!! =P
El punto es que pasamos el puente en una casa con alberca, jacuzzi, drinks, juegos, etc... todo lo necesario para un descanso perfecto... y el sábado, un día antes del salto, hasta subimos el Tepozteco, cosa totalmente imprevista pero que resultó agotadoramente divertido, y que hasta nos incluyó un descenso en Rapell...
Peeeero... lo bueno bueno BUE-NO, vino el domingo... el día del Salto en Paracaídas!... el lugar fue Cuautla al cual llegamos desde muy temprano, y después de firmar las hojas que es mejor no leerlas porque para lo único que sirven es para asustarte, procedimos a esperar nuestro turno. Una larga espera en donde nos emocionamos, nos aburrimos, nos volvimos a emocionar, nos desesperamos, hablamos con nuestros familiares, etc etc etc. Pero que al final de cuentas valió la pena por la experiencia.
El salto?... simplemente espectacular!! y es algo que de verdad se debe de vivir ya que es Adrenalina pura, sentir que estás cayendo sin que nada te detenga, sentir que vuelas, ver el paisaje, ACORDARTE DE RESPIRAR ja ja, y rezar por que nada falle y tu paracaídas se abra!!... Son como 60 segundos de caída libre y otros tantos que vas planeando y disfrutando del vuelo ya con el paracaídas abierto para después aterrizar.
La preparación: Te ponen un traje especial con los respectivos arneses, con lo cual ya te empiezas a poner nervioso, mientras, tu instructor te da las instrucciones de lo que debes de hacer en todo el trayecto. Te suben a una camioneta y te llevan a la pista en donde está la avioneta.
El previo: Ocupar tu lugar en la avioneta, el despegue, y el tiempo que tarda en llegar a la altura adecuada se me hizo eternooo... y tienes que mantener la calma porque ya estás ahí y nada de rajarse. Pero lo peor es sentarte en el borde de la avioneta antes del salto, con los pies afuera, viendo la altura en la que estás y encomendándote a los santos de tu preferencia.
La caída: Al principio no sabes que pasa, das como 2 vueltas antes de estabilizarte, y es mucha velocidad, mucha emoción, el miedo se esfuma y sólo queda disfrutar de caer caer y caer... y en verdad se te olvida respirar! punto importante que te dan en las instrucciones pero que dices "pff!! cómo se me va olvidar respirar?!?!", y ándale, ya que te das cuenta pues si se te olvida ja ja...
El paracaídas: Sigue la diversión, un poco más calmada, das gracias que el paracaídas se abrió y que no te estamparás a más de 200 km/hr en el suelo... aunque también haces giros que se sienten increíbles y en donde tomas velocidad tipo montaña rusa en curva, disfrutas de la vista y gritas como loco...
El aterrizaje: sencillitooo!!! sólo levantas los pies y caes suavemente en el pasto!!... sigues gritando, te desamarran, das de saltos y sólo tienes la idea de repetirlo mil veces!!... te reportas con tu familia para que sepan que sobreviviste y listo!!!
En fin.... ese día concluímos con una arrachera en la casa, mucha alberca y descanso. Al día siguiente, de vuelta a casa con las respectivas fotos del recuerdo en la carretera, tráfico en la caseta, pero felices al final de cuentas.
Así que esa fue la historia resumida de mi 1er salto en paracaídas con el querido EXTREAM TEAM!!! que siempre recordaré. Mil gracias por esa experiencia!!
=)
La verdad es que aprovechamos 5 amigos y yo el puente de marzo para irnos a Morelos y todo estuvo simplemente EXCELENTE.... todos nos fuimos en una camioneta, pero en verdad el tiempo no se siente cuando te diviertes, y eso que ibamos un poco amontonados. El viaje de ida incluyó cruzar el DF y nuestra respectiva cena en 3 Marías con las famosas "Quesadillas con Queso", WTF?!?! en mi opinión, si se llama "quesadilla" es porque tendrá queso... pero por esos rumbos tienes que especificarlo porque sino BYE BYE AL QUESO!! =P
El punto es que pasamos el puente en una casa con alberca, jacuzzi, drinks, juegos, etc... todo lo necesario para un descanso perfecto... y el sábado, un día antes del salto, hasta subimos el Tepozteco, cosa totalmente imprevista pero que resultó agotadoramente divertido, y que hasta nos incluyó un descenso en Rapell...
Peeeero... lo bueno bueno BUE-NO, vino el domingo... el día del Salto en Paracaídas!... el lugar fue Cuautla al cual llegamos desde muy temprano, y después de firmar las hojas que es mejor no leerlas porque para lo único que sirven es para asustarte, procedimos a esperar nuestro turno. Una larga espera en donde nos emocionamos, nos aburrimos, nos volvimos a emocionar, nos desesperamos, hablamos con nuestros familiares, etc etc etc. Pero que al final de cuentas valió la pena por la experiencia.
El salto?... simplemente espectacular!! y es algo que de verdad se debe de vivir ya que es Adrenalina pura, sentir que estás cayendo sin que nada te detenga, sentir que vuelas, ver el paisaje, ACORDARTE DE RESPIRAR ja ja, y rezar por que nada falle y tu paracaídas se abra!!... Son como 60 segundos de caída libre y otros tantos que vas planeando y disfrutando del vuelo ya con el paracaídas abierto para después aterrizar.
La preparación: Te ponen un traje especial con los respectivos arneses, con lo cual ya te empiezas a poner nervioso, mientras, tu instructor te da las instrucciones de lo que debes de hacer en todo el trayecto. Te suben a una camioneta y te llevan a la pista en donde está la avioneta.
El previo: Ocupar tu lugar en la avioneta, el despegue, y el tiempo que tarda en llegar a la altura adecuada se me hizo eternooo... y tienes que mantener la calma porque ya estás ahí y nada de rajarse. Pero lo peor es sentarte en el borde de la avioneta antes del salto, con los pies afuera, viendo la altura en la que estás y encomendándote a los santos de tu preferencia.
La caída: Al principio no sabes que pasa, das como 2 vueltas antes de estabilizarte, y es mucha velocidad, mucha emoción, el miedo se esfuma y sólo queda disfrutar de caer caer y caer... y en verdad se te olvida respirar! punto importante que te dan en las instrucciones pero que dices "pff!! cómo se me va olvidar respirar?!?!", y ándale, ya que te das cuenta pues si se te olvida ja ja...
El paracaídas: Sigue la diversión, un poco más calmada, das gracias que el paracaídas se abrió y que no te estamparás a más de 200 km/hr en el suelo... aunque también haces giros que se sienten increíbles y en donde tomas velocidad tipo montaña rusa en curva, disfrutas de la vista y gritas como loco...
El aterrizaje: sencillitooo!!! sólo levantas los pies y caes suavemente en el pasto!!... sigues gritando, te desamarran, das de saltos y sólo tienes la idea de repetirlo mil veces!!... te reportas con tu familia para que sepan que sobreviviste y listo!!!
En fin.... ese día concluímos con una arrachera en la casa, mucha alberca y descanso. Al día siguiente, de vuelta a casa con las respectivas fotos del recuerdo en la carretera, tráfico en la caseta, pero felices al final de cuentas.
Así que esa fue la historia resumida de mi 1er salto en paracaídas con el querido EXTREAM TEAM!!! que siempre recordaré. Mil gracias por esa experiencia!!
=)
